Javier pasa la noche tranquilo y se enfrenta a un nuevo
día laboral. Es a la una cuando Nicolás pasa por allá y se encuentra a Javier
en la puerta del bar. Nicolás está subiendo por la calle y siente un fuerte
impacto al ver que el chico de sus sueños está solo en la puerta. De pie,
imponente. Guapísimo. ¡Todo un Míster¡ Nicolás siente un gran placer incluso su
miembro viril se le endurece dentro del pantalón. Lleva una camiseta de color
azul celeste que le favorece mucho. Lo hace mucho más guapo y Nicolás se
derrite. Javier lleva unos pantalones a cuadros que a Nicolás le parecen
horribles.
--pero deben estar de moda --piensa Nicolás ya que
ha visto a muchos chicos guapos con el mismo tipo de pantalón.
Nunca se ha animado a ir pero si hubiera llevado dinero
habría entrado. Se para frente al cajero. Su intención es sacar dinero pero se
da cuenta que Javier se dispone a entrar en la bar. Entonces Nicolás sigue su
camino y Javier se queda en su sitio, en frente del bar. Nicolás está seguro
que Javier se hubiera escondido para no atenderlo así que prefiere reservarse
para otra ocasión.
--tengo que ir si lo veo que no se me pueda escapar.
Igual no se puede quejar, está en la calle. Podía haber pasado por su lado,
mirarlo gratis pero no lo he querido martirizar. Seguro que le doy asco.
Nicolás pasa por el medio de la calle que es peatonal, lo
separan de Javier las mesas de la terraza de la bar. Puede pasar del otro lado,
pegado a Javier pero le gusta el chico de veras y no lo quiere molestar. Ya le
va bien disfrutar de él a la distancia.
********Diario de Emilio 5 de junio
13 h
¡Hostia que bueno que está Joaquín¡ Pedazo de culo que
tiene. Me gustaría vivir una historia de amor y mucho sexo con él. Me habría
dicho a mí mismo que no volvería esta semana pero es que me tiene recaliente.
Doy por bien gastado el dinero. Él está fuera. No me fijo en la camiseta sí en
los jeans. Aquellos que le hacen unas arruguitas muy sexys. Llegan unas niñas y
él entra. Y yo quiero ir pero hay otra camarera y él no me va a atender. Quiero
ir aunque sea para verle el culo pero no sé si estoy yendo demasiado y no
quiero que se cabree. Me voy pero vuelvo porque me gusta demasiado. Él está
solo fuera de la barra y no me lo pienso. Entro. Él está hablando por el móvil.
No me hace caso y es una llamada personal. Habla con su tía Pili. ¿no me
atenderá por una llamada personal? –pienso. Igual no me sabe mal porque está en
la barra. ¡a mi lado¡ culo muy en pompa. ¡La visión que tengo cuando paso por
detrás es orgásmica¡ ¡que cachondo me pone pensar en eso¡ Estoy a su lado. Se
le ve el culo en pompa de lado. Sólo una nalga pero increíble ¡impresionante¡
Muy buen culo y gozo de él por un buen rato y muy bien ¡increíble¡ Entra en la
barra. Sin dejar el móvil y con gestos me pide lo que quiero. Le pido una
mediana. Llega el otro chico guapo. Joaquín queda por dentro de la barra
hablando. Culo muy en pompa. No se mueve y eso que los dos no caben. ¡Se rozan
cuando el otro pasa por detrás¡ wow, es como si le estuviera dando por culo a
Joaquín ¡y otro guapo¡ El otro guapo le pregunta algo a Joaquín, dice que sí.
Entonces me atiende. Cuando acaba su llamada, Joaquín sale de la barra y se
queda a mi lado haciendo cuentas. El culo se le ve aplastado. Yo estoy
encantado.
18,30
¡guapo, guapo y guapo¡ Supermacizo. Lo veo a 18,28. Estoy
más ansioso y lo veo más abajo. No me pongo muy cerca de él porque no quiero
parecer descarado. Él ya no va por el medio de la calle (es peatonal) sino por
el lado del bar. Deprisa. No me mira. Muy guapo pero parece que vaya por la
vida enfadado. Bermudas horribles, gafas en la cabeza (muy útiles) Muy tipo
duro. Me encanta. Mira el reloj. Entra en el bar. La visión ha durado apenas
unos segundos pero me ha encantado. He ido detrás de él, a la distancia, no le
veo el culo de cerca como para gozar de él. ¡me encanta este bello ejemplar de
macho¡ Este tío me tiene loco
20,30
Lo veo bastante rato. Estoy unos cinco minutos por allá.
Bastante cerca. Él va recogiendo varias mesas pero siempre de cara a mí. Yo
estoy por el medio, por el otro lado, nos separan unas mesas. Ya queda poco
para que yo llegue y ¡me da el culo¡ Está bastante rato a mi lado hablando con
unas viejas.
***************
***************
Comienza un nuevo día. Javier llega al trabajo y ve a
Nicolás que está intentando mirar si está. Le hace gracia.
--¡este chico busca que le rompa la cara¡
Pero Javier no se siente acosado como Joaquín. Le hace
gracia la devoción que ve en él.
--lástima que sea tan feo… ¡Si es que parece un gnomo¡
Javier se ríe. Es travieso. Pasa por detrás del chico.
Nicolás está pendiente del bar. De pronto nota una mano en sus hombros.
--¿me buscabas?
Nicolás está temblando. Casi no se gira. Javier se pone
delante de él. Se muestra duro. Nicolás no sabe si le va a golpear. A Javier le
hace gracia como lo mira. No levanta la mirada. Está sofocado.
--oye, ahora que me tienes cerca mírame.
Es demasiado feo. Sabe que es imposible que haya estado
con alguien. Debe tener unos 20 años y a Javier, que no se lo piensa mucho a la
hora de llevarse a un chico a la cama, le hace gracia ver cuál sería su
reacción al tener una verga dentro. Su verga.
--¡a ver si no se me muere¡ –dice para sí divertido.
Nicolás está sofocado. No se atreve a mirarlo. Javier se
ríe.
--tío, llevas semanas espiándome y ahora ¿no dices nada?
Nicolás balbucea pero es que no le sale la voz.
--supongo que con esa cara eres virgen ¿no?
Nicolás siente que le va a dar un infarto. Está sofocado,
avergonzado. A punto de desmayarse. A Javier le hace gracia la reacción del
chico. Se muestra brusco pero no está enfadado.
--Mira yo estoy trabajando y no puedes pasártela
mirándome. Yo te hago el favor pero no te quiero volver a ver.
Nicolás mira a Joaquín con el rostro desencajado por la
sorpresa. No cree haber entendido bien.
--mira –señala un lavabo público que hay cerca—tengo aún
quince minutos. Lo hacemos, ya no eres virgen, te vas a casa contento y me
olvidas ¿vale?
Javier le sonríe divertido. Le guiña el ojo. Nicolás no cree que
pueda resistirlo. Javier mira que no lo vea nadie. Le hace gestos para que lo
siga. Los dos encerrados en el baño. Nicolás está viviendo un sueño. No se
atreve a tocarlo. Se viene cuando ve a Javier con los pantalones y los calzoncillos
a sus pies. Javier se le ríe.
--¡es que pareces una niña¡
Nicolás se queda de pie sin saber qué hacer. Javier le
golpea en los hombros para que se agache.
--¡venga mámamela¡
Nicolás se vuelve loco. A Javier le divierte. Es muy feo
pero le hace gracia la pasión que pone. Parece que se la va arrancar. Le cuesta
quitársela de la boca.
--déjala que si me vengo se te acaba la fiesta…
Mientras Javier se pone un condón, Nicolás se baja la
ropa. Javier lo pone cara al wáter. Lo lubrica con su saliva. Le hace meter el
brazo en la boca para que no grite. Nicolás se hace sangre al sentir como lo
taladran. No pensó que doliera tanto.
--me duele…
--¡pues te jodes¡
Javier es brusco. Le hace gracia estar causando dolor a
ese chico en su primera vez. No quiere
nada con ese feo pero no piensa nunca lo que hace. Sólo piensa en divertirse.
Nunca estrenó a alguien como Nicolás y le divierte.
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